Segovia. Torreón de Lozoya

En principio es una idea, una imagen, un garabato, un croquis; no se sabe exactamente cómo viene pero viene. Más adelante aparece una propuesta gráfica, una geometría, un propósito de desarrollar un determinado tema. Después se intuye una concreción, un soporte y una técnica: Primero es el lápiz y la aguada, el pigmento... Témpera, acrílico y óleo sobre el soporte, que podrá ser papel, cartón, collage, tabla o tela, y todo ello de manera liviana, respetando la bondad y las posibilidades del material. Y a partir de aquí todo viene hilado:

Consiste en ponerse a trabajar.

El PAISAJE es el tema eterno: está ahí para que se observen sus reglas y su estructura funcional: Siempre es diferente. Por el sol y la sombra, por los distintos planos hasta llegar a las lejanías, son visiones cambiantes, y el dibujo se enriquece y revitaliza con el movimiento del trazo. Cualquiera que sea la técnica empleada, las posibilidades del color son infinitas. En este caso sigo el cauce del río Clamores, la Cañada Soriana, el río Eresma en las Pesquerías, y el monte bajo de Cabo de Gata y de Tabernas (Almería), con acuarela, témpera y óleo sobre papel y lienzo.

En los RETRATOS amplío el formato -la pincelada es más gestual-, y al cambiar la escala trato de sorprender al personaje en su verdad oculta o más íntima para contemplarlo en otro contexto; Rita es insegura en su belleza, la Duquesa de Goya es intensamente triste, Asmaa o la flor de la inocencia, el Caballero de El Greco expresa la honestidad plena. El hombre de los fusilamientos es la terrible súplica ante lo ignominioso y miserable del destino. Los personajes están ahí, nos miran, preguntan, inquieren... al mismo tiempo que nosotros los contemplamos. He utilizado material manejable y sencillo como cartón, carboncillo y técnicas al agua.

En los PAISAJES URBANOS me interesan las fachadas como reclamo visual de lo que es la arquitectura de lo cotidiano. Los personajes de la calle no están ahí de relleno, más bien son indispensables para el equilibrio compositivo; el pintor hace aquí de mirón y ellos nos observan sorprendidos. Óleo sobre tabla o lienzo.

Las NATURALEZAS MUERTAS requieren un interior de perspectiva laboriosa que se va simplificando hasta dejar una idea mínima de espacio envolviendo los objetos o volúmenes. Óleo sobre tabla y lienzo. Con los años se va simplificando y trabajando con menos material. Ahora busco otros soportes y otros formatos y me interesa todo lo que concierne a la pintura:

Descubrir al personaje en un Retrato, frasear un Desnudo, componer un Bodegón o un Paisaje, con las manos y los pinceles, siempre serán actividades creativas y estimulantes.